Lee el texto y responde la pregunta desde 1 a 2. Cuando sea el medio día, te encontrarás en la plataforma trasera de un autobús donde se amontonarán los viajeros, entre los cuales notarás un ridículo jovencillo: cuello esquelético y sin cinta en su sombrero de fieltro. No se encuentra bien ese pequeño. Él pensará que un señor lo empuja voluntariamente cada vez que la gente sube o baja. Él se lo dirá, pero el otro no responderá, despreciándolo. Tomado de: Queneau, R. (1947) Ejercicios de estilo. Paris: Gallimard. ¿A quién se dirige el narrador? A. A sí mismo. B. A un lector. C. A un personaje. D. Al protagonista.